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Educadores, formadores y trabajadores, ya experimentan el impacto de las tecnologías del metaverso en España

  • Son muchas las empresas e instituciones españolas que están dando vida al metaverso aprovechando la realidad virtual y aumentada para impulsar un trabajo innovador y crear nuevas oportunidades que beneficien a la sociedad.
  • Compañías como Kiin o Iveco e instituciones como Esade ya utilizan tecnologías inmersivas para ayudar a formadores, trabajadores y educadores en entornos digitales totalmente inmersivos. 

El metaverso podría aportar al PIB de la UE entre 259.000 y 489.000 millones de euros más al año de aquí a 2035, según un estudio elaborado por Deloitte para Meta. En el caso de España, el impacto económico del metaverso podría alcanzar entre 28.000 y 53.000 millones de euros en 2035. Estas cifras ponen de manifiesto el alto potencial de las tecnologías del metaverso, que ya tienen un impacto real en las empresas y en la sociedad actual.

Hoy compartimos las historias de varias empresas españolas que utilizan estas tecnologías inmersivas, así como el impacto tangible que ya tienen en sus respectivas industrias o sectores. Todas ellas son empresas líderes en sus respectivos campos, que han decidido apostar por tecnologías como la RV y la RA en el ámbito empresarial. 

Educación

Uno de los sectores que mayor transformación está experimentando es el de la educación, en el que las tecnologías inmersivas están ayudando a crear nuevas formas de inspirar y aprender. 

Según un informe de PwC, el 40% de los alumnos de realidad virtual (RV) se sienten más seguros a la hora de aplicar lo que se les ha enseñado y participan un 150% más durante las clases. Asimismo, la XR Association y la Sociedad Internacional para la Tecnología en la Educación descubrieron que el 77% de los educadores creen que las tecnologías inmersivas despiertan la curiosidad y mejoran el compromiso en clase. 

A la vanguardia de esta labor encontramos a la escuela de negocios Esade, que junto a los desarrolladores de realidad virtual Extendra, ha creado una réplica virtual lo más parecida posible al campus físico de Esade, de tal forma que alumnos de todo el mundo puedan asistir a sus clases independientemente de donde se encuentren. El campus virtual es un campus abierto e incluye un aula magna, salas de reuniones y un espacio de ocio. De este modo, los estudiantes pasan de utilizar una pantalla para acceder al contenido, a que el contenido les rodee, de tal forma que la comprensión de ese contenido es más intuitiva y experiencial, además de permitirles imaginar como sería en el mundo real.

Diversidad e inclusión

Las tecnologías inmersivas no solo ayudan a cambiar el entorno educativo, también son una poderosa herramienta para potenciar el desarrollo personal y reforzar aspectos como la empatía. Es una de las áreas que trabaja por ejemplo la empresa Kiin, que ofrece formación inmersiva sobre diversidad e inclusión, de forma que los usuarios pueden ponerse en la piel de otra persona, de diferente sexo, raza o rol dentro de una compañía y experimentar cómo son percibidas diferentes tipos de acciones, como por ejemplo micro-agresiones, cuando ellos son el receptor. Se trata de una experiencia única, inmersiva y tangible que no es posible proporcionar en el mundo real y que puede llevar a un cambio de actitud. Además, es una herramienta muy bien recibida por parte de los usuarios, facilita la discusión sobre estas experiencias y fomenta un cambio de actitud.

Sector industrial 

Otro de los sectores que más está experimentando el impacto de estas nuevas tecnologías es el industrial. Un buen ejemplo de ello es el fabricante de vehículos industriales Iveco, que utiliza las tecnologías inmersivas para la formación de sus empleados en materia de protección de riesgos laborales. Gracias a un puesto de trabajo virtual, específico para el manejo de maquinaria en la cadena de producción, creado por el desarrollador de experiencias VR y RA, Xperiencia Virtual, e implementado en la planta de Valladolid, la compañía consiguió reducir los tiempos de formación en un 75% y obtener una tasa de éxito del 100% en cuanto al uso de los equipos de protección. Además, mejoraron la eficacia de la formación en un 93%, aumentaron la satisfacción de los trabajadores en un 84% y, lo más importante, consiguieron que los trabajadores de la fábrica se llevaran la cultura de la seguridad a sus casas. 

Todos estos ejemplos muestran cómo las tecnologías inmersivas están desbloqueando nuevas oportunidades con un impacto positivo en la sociedad y en la economía españolas.



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